Samsung Galaxy S25 Edge, review: más fino y más caro que el S25+

¿Buscas un gama alta premium con el diseño más delgado del mercado? El nuevo Samsung Galaxy S25 Edge es el modelo más estilizado de la serie Galaxy S25 y ofrece un equilibrio entre potencia, pantalla y estética. En esta review lo analizamos al detalle para ayudarte a decidir si es el smartphone perfecto para ti.
Samsung continúa apostando por la innovación en diseño y promete hasta 7 años de soporte Android. Si quieres un móvil potente, bonito y diferente, sigue leyendo.

Diseño ultradelgado que marca la diferencia

El Galaxy S25 Edge tiene solo 5,8 mm de grosor, lo que lo convierte en uno de los móviles más delgados del mercado. Con 163 g de peso, su ligereza es ideal para el día a día. La sensación en mano es excelente, gracias a los cantos planos y la buena distribución del peso.

Su diseño no solo es bonito, también resistente: cuenta con protección IP68 frente al agua y polvo. A diferencia del resto de modelos S25, este modelo es claramente el más refinado y ligero, lo que lo convierte en una excelente opción para quienes priorizan estética sin renunciar a potencia.

Pantalla vibrante y bien protegida

La pantalla del Galaxy S25 Edge es una Dynamic AMOLED 2X de 6,7 pulgadas, con resolución Quad HD+ y tasa de refresco de 120 Hz. Ofrece una experiencia visual nítida, fluida y con buen nivel de brillo (hasta 2600 nits), ideal incluso para exteriores.

El panel es compatible con HDR10+ y cuenta con Gorilla Glass Ceramic 2, una protección que garantiza durabilidad sin renunciar a una estética cuidada.

Software: One UI 7.0 y 7 años de actualizaciones

El Galaxy S25 Edge llega con Android 15 y One UI 7.0, una capa muy pulida y fluida. Destaca por incluir 7 años de soporte de actualizaciones de sistema y seguridad, una cifra que posiciona a Samsung como referente en longevidad Android.

En el apartado de funciones, encontramos inteligencia artificial aplicada al modo intérprete, resumen de texto, transcripción de llamadas o el borrador mágico para editar fotos fácilmente. Una combinación entre potencia y practicidad.

Potencia bruta con el Snapdragon 8 Elite

El S25 Edge incorpora el nuevo Qualcomm Snapdragon 8 Elite, fabricado en 3 nm, uno de los chips más potentes del año. Junto a sus 12 GB de RAM y almacenamiento UFS 4.0, el móvil ofrece fluidez absoluta, incluso en multitarea exigente o juegos con gráficos al máximo.

No hay microSD, pero con opciones de 256 o 512 GB es más que suficiente. Además, cuenta con lector de huellas bajo pantalla y desbloqueo facial.

Batería modesta por el diseño

Aquí encontramos su mayor compromiso: el Galaxy S25 Edge tiene una batería de solo 3.900 mAh. Su diseño ultradelgado limita el espacio, y aunque el consumo está optimizado, es posible que no llegue al final del día en usos muy intensivos.

La carga rápida es de 25 W por cable y también cuenta con carga inalámbrica. Aunque el tiempo de carga no es el más competitivo, permite mantener el diseño fino y elegante sin eliminar funciones importantes.

Cámaras: excelente sensor principal, sin teleobjetivo

El sistema de cámaras del Galaxy S25 Edge se compone de:

• Principal de 200 MP (f/1.7) con OIS
• Ultra gran angular de 12 MP (f/2.2)
• Frontal de 12 MP

La calidad fotográfica es muy buena, especialmente con el sensor principal, que también encontramos en el S25 Ultra. Las fotos tienen buen rango dinámico, detalle y control de luces. El gran angular cumple bien de día, pero flojea de noche.

En vídeo, permite grabar en 8K y 4K a 60 fps, con excelente estabilización. La ausencia de un teleobjetivo es la mayor carencia fotográfica de este modelo.

Precio y disponibilidad

El Samsung Galaxy S25 Edge está disponible en dos configuraciones:

• 12 GB + 256 GB: 1259 euros
• 12 GB + 512 GB: 1379 euros

Puedes conseguirlo en colores negro, plata y azul, y su diseño ultradelgado marca una diferencia notable con respecto al resto de la familia Galaxy S25.

Opinión de la editora

El Galaxy S25 Edge es una joya para quienes valoran el diseño por encima de todo. Es el Galaxy S más ligero y delgado, pero mantiene un nivel de potencia altísimo. Eso sí, su batería puede quedarse corta si eres muy exigente, y se echa de menos un teleobjetivo. Aun así, su equilibrio entre estilo, rendimiento y durabilidad lo convierten en una excelente opción.