Precio y características del Realme 11

Cuando Realme llegó a España hace ya unos años, pocos pensábamos que iba a convertirse en una de las marcas con los mejores modelos en la gama media. Su serie número, que partió desde el Realme 6 en nuestro país, ha llegado ahora hasta una nueva generación que supera con creces las expectativas, aunque estamos hablando de un móvil con ciertos recortes.

Con este nuevo Realme 11, tenemos una familia de tres dispositivos (también están el Realme 11 Pro y Realme 11 Pro+) donde el modelo estándar ha venido a conquistar a aquellos que buscan un diseño realmente innovador, que ya es marca de la casa; y toda la potencia que se le puede pedir a un dispositivo que, a pesar de no tener precio oficial en España, es muy probable que no supere los 300 euros.

Seguimos con un diseño fantástico

Cuando hablamos de Realme, hablamos de dispositivos con diseños increíbles, marcados por texturas, colores y acabados que rara vez hemos visto en otros teléfonos (aunque cada vez es más común). En el caso del Realme 11, la compañía china sigue esta línea con un diseño marcado por unos bordes planos en color dorado y un tono anaranjado en la parte trasera, que está texturizada.

Además, el módulo de cámaras formando círculos concéntricos en tonos negro y dorado le queda tremendamente bien, y es un patrón que se repite en los modelos superiores, haciendo que este tenga un aspecto más premium. Eso sí, habrá que esperar a la review para ver si es tan cómodo como parece, ya que cuenta con un peso de poco más de 180 gramos.

En la parte de delante tenemos un panel AMOLED de 6,43 pulgadas de resolución FHD+ y una tasa de refresco de 90 Hz. Estamos acostumbrados ya a este tipo de pantallas en la gama media, y ha demostrado ser un panel muy equilibrado en este rango de precios, donde es preferible tener tecnología AMOLED y una tasa algo más baja que un panel IPS con 120 Hz.

Rendimiento y batería a la altura

En el interior de este bonito Realme 11 encontramos el Dimensity 6020, un procesador de MediaTek que, aunque no tiene una potencia descomunal, servirá para las principales aplicaciones e incluso algún juego. Con 8 y 12 GB de RAM y hasta 256 GB de almacenamiento no nos faltará de nada, y gracias a ese panel AMOLED, la eficiencia estará asegurada.

Hablando de eficiencia, su batería de 5.000 mAh y su carga de 33 W nos ofrece un día entero de batería sin darle demasiada caña, y poder cargar la mitad de su capacidad en una media hora. Si recordamos que es un móvil que con casi total seguridad no superará a los 300 euros, no está nada mal.

Las cámaras podrían mejorar, pero el equilibrio es la clave

Cuando nos fijamos en ese ojo de cíclope del Realme 11, nos encontramos con un sensor principal de 64 megapíxeles apoyado por un sensor de profundidad de 2 MP. Lo cierto es que aunque el primero de los dos tiene una buena resolución, estamos acostumbrados a tener más megapíxeles o al menos un tercer objetivo en forma de ultra gran angular.

En cualquier caso, si miramos el global de este dispositivo, sus cámaras son un extra más que le da equilibrio al Realme 11, un terminal de la gama media con todo lo necesario para el día a día, con buena pantalla, una potencia correcta y un aparado fotográfico que te sacará de cualquier apuro sin mucha dificultad.